Vivimos en una época donde la conciencia medioambiental cada vez va a más. Por ello se empieza a hablar de sexo ecológico o sexo verde.
La conciencia medioambiental y la preocupación por la sostenibilidad es algo que también llega a la sexualidad. Poco a poco, el concepto de sexo ecológico o sexo verde cada vez se va escuchando más. Comenzó hace años, pero es en la década de los 20 cuando está creciendo. (Al menos en 22 y 23) En gran parte por la aparición de condones ecológicos y veganos. Si, existen preservativos ecológicos y también veganos. Los ecológicos se basan en que están libre de químicos y de tóxicos.
Esto se basa en que entienden que el látex, pese a ser de origen vegetal y natural, en su procesado para mejorar su características y darle mayor estabilidad, se añaden pequeñas cantidades de otros productos químicos. Dicho esto, hay que recordar que los condones que están a la venta, todos han tenido que pasar por unos estándares de calidad y seguridad que establecen los distintos organismos. En el caso del mercado europeo, se regula por el marcado CE obligatorio para productos sanitarios. Por lo que están libre de tóxicos y otras sustancias que puedan ser perjudiciales. En el caso de los veganos, tienen el plus de que sus fabricantes se comprometen a que los testeos previos de fábrica, no se realizan en animales.
A la hora de desechar los condones, recuerda que se deben tirar en el contenedor gris, que es el de restos. Ya que el látex aun siendo orgánico y de origen vegetal, por sus características no se puede reciclar ni reutilizar. Además que siempre que lo tires, va contaminado con restos de productos orgánicos que tu mismo/a has producido. (Recomendación de ecoembes)
Dentro del sexo ecológico, también se puede disfrutar de complementos como los lubricantes y juguetes sexuales. En el caso de los lubricantes, la opción que más recomendamos desde este blog (leer), es el usar los lubricantes comerciales que son en base a agua. Por suerte, la propia industria está tomando la iniciativa y cada vez se ven menos los lubricantes en base aceite u otros productos. También por que los que son en base agua, son compatibles con los materiales de juguetes sexuales y generan menos problemas de reacciones en humanos.
Otro lubricante que se puede utilizar es la saliva. Nosotros mismos lo hemos recomendado en alguna entrada, pero hay que ser conscientes que no es la mejor opción y que aumenta el riesgo de contagio de enfermedades e infecciones de transmisión sexual. En algunos lugares, recomiendan usar otro tipo de productos “naturales y alternativos” para ayudar en la lubricación. En estos casos, tener especial precaución. Muchos pueden provocar reacciones adversas en el cuerpo o complicaciones con las mucosas. Aunque sea algo tan simple como aceite de oliva o mantequilla. Pueden ser irritantes o desencadenar efectos adversos.
El sexo ecológico o sexo verde, se puede entender de varias formas. Al margen de lo comentado ya, hay ciertas prácticas que quizás de forma aisladas no se puedan considerar sexo ecológico o sexo verde pero en su conjunto si sume a ser más respetuosos con el medio ambiente y la sostenibilidad.
Estas prácticas son por ejemplo; evitar caer en la tentación de una sesión de sexo en la ducha o bañera. Tener relaciones con la luz apagada. Ser conscientes de que la práctica sexual es un ejercicio físico moderado o intenso, por lo que es inevitable sudar. En las zonas y épocas más calurosas, no os vamos a decir que quitéis el aire acondicionado, pero si adecuarlo con los consejos de eficiencia energética. En caso de hacerlo en coches, aprovecha esto en vuestro beneficio, alargar los juegos previos ayudará a empañar los cristales, o realizarlo sin tener que desnudarse al 100%. Si disfrutas del placer en la naturaleza, recuerda no dejar residuos, especialmente evita abandonar los preservativos, pueden resistir años sin desintegrarse.
Como ves, si quieres tener una vida más sostenible y amigable con el entorno, también puedes aplicar acciones en tu vida sexual, el llamarlo sexo ecológico o sexo verde ya lo dejamos a tu elección.
¿Lo hacemos ecológico?
