Teabagging, la práctica de comer huevos

Todas las prácticas sexuales tienen un nombre, y la de comer los huevos a un tío no iba a ser una excepción.

Desde este blog ya os comentamos en otra entrada que los testículos son los grandes olvidados. (ver aquí). En esta ocasión vamos a explicaros otra opción diferente de jugar con esta parte de la anatomía masculina.

El teabagging se puede considerar una de las prácticas sexuales un poco más duras dentro del sexo oral. Como siempre, es muy importante que ambas personas estén de acuerdo en realizarla de forma voluntaria.

El teabagging es hacer sexo oral con los testículos. Consiste en que una persona esté agachada, con la cabeza hacia arriba y la boca abierta. Entonces un chico, se coloca encima y hace por introducir los testículos en la boca de esa persona. El gesto tiene que ser algo similar a cuando se hace una infusión. Meter la bolsita en el agua. De ahí el nombre de esta práctica. La traducción de teabagging es “bolsita de té”. Obviamente puede chupar chicos y chicas.

Todo siempre es cuestión de gustos, pero Toulouse os recomienda que el chico que vaya a recibir el sexo oral, lleve los testículos y toda la zona depilada. Sobretodo por que para la persona que chupe y se los tenga que meter en la boca le será mucho más agradable que la sensación de los pelos. Es importante recordar que no a todos los hombres les tiene que gustar y dar placer esta práctica.

Los testículos son una zona especialmente sensible del cuerpo y puede ser que al roce y jugar con el escroto no termine siendo algo placentero. Además de no darle placer, puede ocurrir que haya algún chico que no se sienta cómodo realizando esta práctica, aunque sea el que recibe el placer. Algunas personas tienen muy sobrevalorado su miembro sexual y lo que le rodea. Mentalmente siente que si la otra persona no presta cuidado puede hacerle daño, o estar demasiado cerca de su ano. Con esa presión propia, estará muy tenso y no disfrutará.

¿Qué hacer cuando tengas los huevos en la boca? Depende tu capacidad para aguantar. Se puede hacer una especie de garganta profunda y dejar que entren completamente en la boca. Al chico le puede resultar muy morboso si consigues cerrar la boca y siente en la base del escroto como cierras los labios. Con la lengua puedes probar a jugar a “separar” los testículos y jugar con ellos. Recuerda hacerlo con calma y delicadeza, es una zona muy sensible y con excitación aumenta la sensibilidad.

Si la persona que come está acostumbrada a las prácticas un poco más fuertes y le gusta la acción. (Al igual que al chico que se deja comer) Se puede hacer una práctica un poco más dura y es dejar que sea el chico el que se mueva para hacer el teabagging estilo garganta profunda. Por un tema de excitación y morbo, seguramente le excite mucho si la otra persona no deja de babear y parece estar “sometida” a comerle los huevos. Recordad que el teabagging es simplemente un juego y que ambas personas debéis estar de acuerdo en aumentar la agresividad de la práctica.

¿Ponemos la «bolsita de té a remojar»?